Cuando tu cuerpo te habla

¿Te levantas con la mandíbula tensa, dolor de cabeza o hasta los dientes sensibles? No es casualidad ni mala postura: probablemente sufres de bruxismo—el hábito inconsciente de apretar o rechinar los dientes mientras duermes.

Lo que parece un simple malestar es, en realidad, una alarma encendida de tu cuerpo. El bruxismo no solo desgasta tus dientes; puede provocar dolor de cuello, contracturas, insomnio, fatiga e incluso alimentar la ansiedad. Es tu sistema nervioso tratando de liberar el estrés acumulado.

¿Qué puedes hacer hoy para empezar a mejorar? 

• Aplica calor húmedo en la zona de la mandíbula antes de dormir. 

• Evita masticar chicle o hielo: eso solo empeora la tensión. 

• Haz estiramientos suaves de rostro y cuello, respirando profundo. 

• Practica técnicas de relajación, como meditación guiada o respiración consciente. 

• Y lo más importante: consulta a un dentista o fisioterapeuta si el dolor persiste. Ellos pueden recomendarte férulas de descarga o ejercicios personalizados. 

Recuerda: tu cuerpo nunca miente. Escucharlo es el primer paso para sanar, dormir mejor y vivir con menos estrés.